Decenas de miles de personas se manifestaron este sábado en Tel Aviv para exigir el fin de la guerra en la Franja de Gaza y rechazar el plan del Gobierno israelí para ocupar la Ciudad de Gaza, el mayor centro urbano del territorio palestino.
La movilización, considerada una de las más grandes de los últimos meses, se llevó a cabo un día después del anuncio oficial del plan militar.
Los manifestantes portaron pancartas, fotografías de los rehenes que siguen en manos de Hamás y consignas contra la ofensiva militar.
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La asistencia se estimó en decenas de miles de personas, mientras que un grupo que representa a las familias de los rehenes aseguró que había hasta 100 mil participantes, aunque las autoridades no emitieron un balance oficial.
“Si usted invade partes de Gaza y los rehenes son asesinados, lo perseguiremos en plazas, mitines y en todo lugar”, advirtió Shahar Mor Zahiro, familiar de un rehén muerto, durante el acto, de acuerdo con agencias.
Un plan militar en medio de la presión internacional
El gabinete de seguridad de Benjamin Netanyahu aprobó el viernes un plan para que el ejército israelí tome el control de la Ciudad de Gaza, ubicada en el norte del enclave y en gran parte destruida tras 22 meses de enfrentamientos.
El objetivo, según el Gobierno, es “liberar” la zona de Hamás, mientras se distribuye ayuda humanitaria en sectores fuera del área de combate.
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El anuncio provocó una ola de críticas internacionales, incluso de países aliados de Israel, que han insistido en la necesidad de un alto el fuego para facilitar el intercambio de rehenes y atender la crisis humanitaria.
Naciones Unidas ha advertido que más de dos millones de palestinos enfrentan una amenaza de “hambre generalizada”.
Netanyahu defendió su estrategia en redes sociales al afirmar:
“No vamos a ocupar Gaza, vamos a liberar a Gaza de Hamás”.
Sin embargo, el movimiento islamista palestino consideró que la decisión equivaldría al “sacrificio” de los 49 rehenes que aún retiene, de los cuales 27 se presume muertos.
Rehenes y presión social en Israel
Familias de los rehenes y organizaciones pacifistas israelíes insisten en que la única salida viable es un acuerdo de alto el fuego con Hamás que permita el intercambio de prisioneros palestinos por los cautivos.
Desde el inicio de la guerra, el 7 de octubre de 2023, Netanyahu ha enfrentado múltiples protestas que exigen la liberación de los secuestrados y una solución negociada.
La tensión política se ha incrementado, pues sectores de la sociedad israelí acusan al Gobierno de priorizar objetivos militares sobre la seguridad de los rehenes.
Las movilizaciones han sido recurrentes frente a la residencia del primer ministro y en plazas centrales de Tel Aviv.
En paralelo, el Consejo de Seguridad de la ONU celebrará este domingo una reunión de urgencia para abordar la situación en Gaza y analizar el impacto del nuevo plan militar.
Diplomáticos han adelantado que se espera un debate intenso debido a la resistencia de Israel a frenar su ofensiva.