La Comisión Permanente del Congreso de la Unión aprobó este jueves un pronunciamiento de condena a la agresión ocurrida contra el presidente de la mesa directiva, el morenista Gerardo Fernández Noroña, durante la sesión del miércoles.
El documento fue respaldado por Morena y sus aliados, pero fue desairado por los legisladores del PAN y de Movimiento Ciudadano, quienes optaron por ausentarse de la votación.
En la sesión, diputados y senadores del PRI aprovecharon para dirigir severas críticas contra Fernández Noroña, a quien acusaron de haber provocado la trifulca en la que se vio involucrado con legisladores priistas y con el dirigente nacional de su partido, Alejandro “Alito” Moreno Cárdenas.
Morena impulsa la condena
El pronunciamiento aprobado señala que:
“La Comisión Permanente del Congreso de la Unión condena la agresión de los legisladores federales del PRI y exige al grupo parlamentario detener sus acciones violentas, en apego a las normas constitucionales”.
Fernández Noroña, al frente de la sesión, leyó el documento y acusó que el ataque en su contra fue cobarde.
“Fueron a agredirme por la espalda. Y el cobarde soy yo: seis personas en mi contra y el cobarde soy yo. Nunca en la historia habían subido seis legisladores de un partido a agredir al presidente”, dijo con voz enérgica.
El legislador morenista insistió en que el PRI debe conducirse con institucionalidad y pidió a las mesas directivas de ambas cámaras dar seguimiento a las denuncias penales que resulten del altercado.
“En toda la historia nunca se había agredido a la persona presidenta. Es grave que haya sido por un senador y dirigente de un partido político nacional”, afirmó.
Cruce de insultos entre Noroña y ‘Alito’
En su turno, Alejandro Moreno Cárdenas subió a tribuna para responder. El dirigente priista acusó a Fernández Noroña de comportarse como un “camorrero” y lo responsabilizó de la crispación en el Congreso.
“Estamos así por el capricho de un fanático, de un infeliz mortal que se encontró de golpe con una cuota de poder. Este personaje ha violado la ley”, lanzó “Alito”, quien además lo llamó “trastornado, fanático, mentecato, desequilibrado, buscapleitos y patán”.
La tensión se trasladó a la memoria histórica. El priista Rubén Moreira recordó que en el pasado, Noroña protagonizó otros episodios de confrontación, como la irrupción con un caballo en San Lázaro y la instalación de barricadas en protesta contra Porfirio Muñoz Ledo.
“Me dirijo a la gente sensata que hay en Morena. Hay un grupo morenista que le gusta polarizar, distanciar y generar enemigos. Pido que trabajemos por México y no nos arrastre el ego de una persona”, señaló Moreira.
Dolores Padierna interviene para evitar un golpe mayor
La diputada morenista Dolores Padierna también tomó la palabra y explicó que durante el altercado decidió interponerse entre Noroña y Moreno Cárdenas para evitar una agresión física de mayores consecuencias.
“Cuando volteé a ver la cara del senador (Moreno Cárdenas) decidí interponerme para que no pasara a mayores”, relató.
Según Fernández Noroña, al concluir la sesión del miércoles fue golpeado por tres legisladores priistas, a quienes acusó de actuar con cobardía. Asimismo, denunció un linchamiento mediático en su contra y acusó al “PRIAN” de solicitar la intervención del gobierno de Estados Unidos en asuntos internos de México. “Son traidores a la Patria”, dijo desde la tribuna.
Una sesión tensa pero sin sobresaltos
La sesión de la Comisión Permanente se desarrolló sin incidentes mayores, pero en un clima marcado por los reproches y acusaciones mutuas. Tras la aprobación del pronunciamiento, Fernández Noroña clausuró los trabajos y se entonó el Himno Nacional.
No obstante, las recriminaciones dejaron ver un Congreso profundamente dividido, en el que los choques personales y partidistas continúan desplazando la discusión de los temas legislativos de fondo.
Con información de Reforma