Los cuerpos desmembrados de al menos tres personas fueron hallados este lunes sobre la carretera estatal Poza Rica-Cazones, en el municipio de Papantla, Veracruz.

Junto a los restos humanos fue dejado un narcomensaje firmado por el grupo delictivo conocido como Grupo Sombra o Mafia Veracruzana, organización vinculada a hechos recientes de violencia en la región.

Elementos del Ejército mexicano, la Guardia Nacional y policías estatales acordonaron la zona y cerraron la vialidad para permitir el levantamiento de evidencias.

Sin embargo, usuarios que transitaban previamente por el área difundieron imágenes de los cuerpos en redes sociales, lo que generó conmoción entre los habitantes del norte del estado.

La Fiscalía General del Estado confirmó el inicio de una carpeta de investigación para determinar el número de víctimas y sus identidades, mediante pruebas forenses de campo y laboratorio.

Este fin de semana se registró un motín en penal de Tuxpan que dejó 8 muertos

Este hecho violento ocurre apenas horas después de un motín en el penal del puerto de Tuxpan, donde internos denunciaron agresiones y extorsiones por parte del mismo grupo delictivo. Durante más de 12 horas, los reos mantuvieron el control del centro penitenciario.

Al recuperar el control, las autoridades encontraron siete reos muertos y once heridos, uno de los cuales falleció más tarde en un hospital, sumando un total de ocho víctimas mortales. La situación dejó en evidencia el poder que aún ejercen las organizaciones criminales al interior de las cárceles veracruzanas.

Extorsiones y escalada de violencia en la región

En las últimas semanas, el norte de Veracruz ha vivido una escalada de violencia atribuida a la presencia de al menos seis grupos del crimen organizado, entre ellos el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), el cartel de Sinaloa, el cartel del Golfo, el cartel del Noreste, los Zetas Vieja Escuela y el Grupo Sombra.

Uno de los casos más impactantes ocurrió a finales de julio, cuando fue difundido un video del secuestro de Irma Hernández, una profesora jubilada y taxista, sometida de rodillas por hombres armados tras negarse a pagar extorsión al Grupo Sombra. Su caso desató indignación nacional.